
¿En qué estrella estará? Pregunto cada noche mientras miro al cielo. Pero quizás la respuesta no sea preguntarse por qué.
Me siento idiota por recordar cada vez que pedí tu amor y no me lo daste, por cada palabra sin sentido que te dije, por cada sentimiento que deje soplar como el viento libre para que llegara a lo más profundo de ti.
Sigo aquí, esperando a que vuelvas a dirigirme una palabra que no salga de tu mente, sino de tu corazón; porque quizás sea una señal para darme cuenta de que los sueños puedan llegar a tener finales felices.
No hay comentarios:
Publicar un comentario